hombre incompleto

mi paisano Antonio Galvez Ronceros, tiene un cuento: el subprefecto. el subprefecto es un funcionario del gobierno de Odría (hechos y no palabras) y tiene que dar un discurso, se mete la mano la bolsillo izquierdo del saco y la saca vacía, se mete la mano al bolsillo derecho del saco y no encuentra nada, se mete la mano en el bolsillo derecho del pantalón y nada obtiene. luego muy serio proclama: "he dicho señores" y toda la gente aplaude.

en una historieta antigua - que acabo de inventarme - había un personaje incompleto, algunas partes de su cuerpo eran visibles y otras no, por ejemplo: en él podía observarse íntegramente la pierna y el pie derecho salvo el talón que era transparente o invisible, podían vérsele los ojos, pero sus orejas parecían no estar, se le veía el brazo derecho hasta el codo pero el antebrazo y la mano derecha no. se podía ver su mano izquierda - con todos sus dedos - paro no el antebrazo y el brazo izquierdo.

el caso del hombre -aparentemente - incompleto, bien puede aplicarse a lo que he dicho o escrito sobre nuestro colegio o nuestro trabajo o nuestros estudiantes.

desde hace mucho tiempo tengo la impresión que algunas cosas que he dicho o he escrito parecen no haberse leído o escuchado o interpretado, parecen no haber existido, o no existir, parece que nunca las dije o nunca las escribí. peor aún que otro las dijo o las escribrió en mi lugar.

esta puede ser una frase final para el cuento "el hombre incompleto de oír y leer" o "el hombre incompleto para la memoria" o simplemente "el hombre incompleto" - si es que ese nombre no ha sido adoptado ya

soy enemigo de la parcialidad, creo en la plenitud, creo en entregarse entero. he luchado siempre apasionadamente por lo que pienso, no podía haberlo hecho de otra manera, respondo a mi manera de ser, ese es mi carácter.

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